Reseña. Avatar, The legend of Korra. Book 1: Air

De bichos medio venenosos

Desde que vivo en Rumorosa he conocido una nueva forma de ver la vida... quizá porque estoy acostumbrada a la vida en la ciudad, nunca termino de sentirme totalmente cómoda en el pueblo, pero la verdad es que tiene sus ventajas.
Por primera vez he conocido un camaleón, me gustaría que mi cámara no hubiese estado descompuesta, porque así tendría pruebas: para empezar, cuando lo vi, no creí que fuera uno... quizá porque sólo los había visto en dibujos, pero tocarlo fue muy divertido.
Uno de mis alumnos lo cazó y luego se me acercó sosteniéndolo en sus manos "Le enseño algo y no se enoja?" Y entonces me lo mostró. Creo que es lindo. Me gustan los camaleones.

Sobre razas

Hace poco una amiga me regaló una perrita a la cual decidí llamar Robin, sí, lo sé, todo el mundo piensa que es nombre de macho, pero a mi me gustó para ser de hembra también, después de todo, no es más que el nombre de un pájaro (y un vigilante de DC) y no dice en ninguna parte que esté limitado por el sexo.
Bueno, el punto es que la perrita es una cruza, si la ves, parece algo entre chihuahua y beagle, toda blanca, excepto por unas manchas color miel en su cola y en sus ojos, a modo de antifaz.
La verdad es que la perra está muy bonita, todos al verla dicen lo mismo, sin embargo, cuando preguntan la raza y les digo que es una cruza de chihuahua y un perro cuyo origen desconocemos, a todos parece írseles el encanto... por qué?
No debería ser importante preocuparse por algo tan absurdo como es la raza, pero, desafortunadamente, en el mundo en el que vivimos, parece que la raza y tu origen son más importantes que cualquier otra cosa, no sólo para los animales, sino también para los humanos.
Es una tristeza.